Inventado en los años 20 en el Harry's New York Bar de París, su historia mezcla mitos y figuras legendarias. Se rumorea que Ernest Hemingway ayudó a popularizarlo, y que Mary Pickford, la gran actriz del cine mudo, sirvió de inspiración para su nombre. Más allá de su origen incierto, lo que está claro es que el Bloody Mary nunca ha dejado de reinventarse. Con un pie en la categoría de cóctel y el otro en la de desayuno, es la excusa perfecta para disfrutar de una copa al iniciar el día.
1
50mlde tequila blanco
100mlde zumo de tomate
15mlde zumo de limón
10mlde salsa inglesa
1 chorrito(s)de salsa picante mexicana (opcional)
1 toque(s)de sal de apio
Pimienta negra rosa
1 cucharadita(s)de rábano picante (opcional)
1rodajita(s)de limón
Guarniciones opcionales: tallo de apio, rodajita de lima, pimiento encurtido, jalapeño
Con el cuchillo, corta una rodaja de limón y pásala por el borde del vaso.
Sumerge el borde en el Tajín (ya sea la mitad o todo el borde).
Llena la coctelera con hielo.
Midiendo con el jigger, agregue el tequila, el zumo de tomate, el zumo de limón y la salsa inglesa en la coctelera, junto con la sal de apio, la pimienta negra (y la salsa picante mexicana y el rábano picante, si se usa).
Agita bien la mezcla pero no con fuerza.
Llena el vaso alto con hielo.
Cuela la mezcla en el vaso alto.
Sirve con las guarniciones de tu preferencia.