Situada en una pequeña bahía en la costa sureste de la Islay, la isla más austral de Escocia, se encuentra la destilería de Lagavulin, hogar de complejos whiskies que son elaborados en alambiques con forma de pera, hechos con cobre. Muchos elementos diferentes contribuyen a su inconfundible carácter robusto, pero la influencia de la turba es particularmente notable en el sabor de este whisky escocés single malt.
Se trata de un whisky con notas ahumadas entre las que destacan las especias dulces. Las notas frescas desvelan la suavidad en su aroma, dejando entrever toques de chocolate con leche y limón ahumado, e incluso aromas marítimos. En boca, se despliega llegando hasta todos los rincones, dejando un rastro aceitoso a la vez que muy agradable. Su gran paladar permite apreciar la completitud de su estructura, con notas carbonizadas y sabor a menta y chocolate negro. El final de este complejo whisky es limpio, duradero y profundamente ahumado, dejando el paladar seco, con un toque ahumado.
Alrededor de 1880, en una de sus visitas a la isla de Islay, el periodista y cronista de whiskies de fama mundial, Alfred Barnard, probó un Lagavulin de ocho años al que describió como 'excepcionalmente bueno y de gran reputación'. Lagavulin 8 rinde homenaje a esta memorable anécdota. Contiene una graduación alcohólica de 48 %.
El galardonado whisky escocés de malta Lagavulin se elabora desde hace más de 200 años en la Isla de Islay, frente a la costa oeste de Escocia. Intensamente aromatizado, ahumado y de sabor profundo, es considerado como el whisky de malta definitivo de Islay, siendo apodado como el Rey de Islay.
Un whisky que siempre aprecia ser servido solo o con hielo.
Un regalo perfecto para los amantes de los whiskies ahumados con un final seco y recuerdos de taninos de chocolate.
SKU 747137
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